"Gracias a tod@s. Se fue la jefa... (pobrecita la guitarra que dolor de mi pañuelo)... Much@s no la conocisteis pero su verdad era de mármol y su candor de piñas verdes. Perdonadme pero no quiero más que llorar y maldecir al destino. No dejéis que el tiempo decida. No dejéis que os gane". Con estas palabras, Alejandro Sanz anunciaba el duro revés que le acababa de dar la vida. Su madre, María Pizarro, falleció anoche de un infarto en su localidad natal, Alcalá de los Gazules (Cádiz), según han confirmado fuentes cercanas a la familia, y el artista ha querido que fuera él y no otro el que anunciara la triste noticia a través de su perfil personal de las redes sociales. Llamad a vuestros padres ahora mismo para decirles que son lo más importantes de vuestra vida. Un abrazo y gracias de nuevo.. La vida sigue pero mal...", añadía un abatido Alejandro.