¿Bajo deseo SEXUAL a los 20?
Por Maria Cupani
Muchos relacionan que los jóvenes de 20 años viven su sexualidad más que a pleno. Tal vez menos responsabilidades, más libertad, que se suman a una cuestión hormonal, hacen que el disfrute de la sexualidad se desarrolle aún más entre los 20 y 30 años.
Sin embargo, existen casos (y no son tan pocos como se cree), de jóvenes de veintitantos que sufren un bajo deseo sexual. Los factores son muchos, y van desde el estrés, los cambios hormonales y hasta la rutina de una relación de larga duración.
Causas del bajo deseo sexual en jóvenes
La libido de una persona no siempre es igual: a veces sube; otras baja, ya que no hay un parámetro “normal". Pero que pueda llegar a ser común no significa que debas convivir con el bajo deseo sexual, por lo cual debes buscar entre las posibles causas. Por ejemplo, son muchas las causas físicas, como el dolor que produce en algunas personas el contacto sexual.
El alcohol, trabajo o estudio en exceso, los medicamentos, el estrés y los cambios hormonales también pueden ser considerados una de las razones del bajo deseo sexual a esta edad, sobre todo en lo relacionado con el ciclo menstrual. Por último, la píldora anticonceptivatambién puede ser causante de baja libido.
Entre todas, las causas psicológicas juegan un importante papel. Especialmente para las mujeres, los factores de esta índole suelen ser más importantes que las físicas. Es que la sexualidad es una combinación de factores, tanto psicológico, emocional como físico.
La baja autoestima, la presión social o las obsesiones suelen ser algunos de los factores psicológicos más comunes. La comparación con situaciones de otros hombres o mujeres pueden afectar el desempeño y deseo sexual de quienes padecen una autoestima baja.
En algunas mujeres, el peso cultural de la virginidad, o ser niñas buenas o malas, recae en la liberación física de las hormonas. Una educación conservadora de abstinencia sexual, tomar al sexo como algo malo o un pecado para algunos religiosos llevan a una represión sexual.
¿Qué se puede hacer?
No hay una única solución fácil o pastilla contra el escaso deseo sexual. Como primera medida, consulta a tu médico. Aunque para ti resulte extraño o vergonzoso, ten por seguro que tu doctor trata con situaciones como esta todo el tiempo.
Además, existen algunos cambios en tu vida que te ayudarán a superar esa indiferencia hacia el sexo. Comer bien y hacer ejercicios es una de ellas: para conseguir una sexualidad plena y saludable, comienza por que tu vida general también lo sea.
Por supuesto que menos estrés también te vendrá bien, ya que, como dijimos, una de las causas de la inapetencia sexual es el estado de nerviosismo. Muchas actividades y poco descanso no ayudan. Intenta tener momentos íntimos, como un buen baño tibio y alejarte de toda la rutina y sus exigencias.
Como el bajo deseo sexual puede tener una consecuencia psicológica, en estos casos, ponerte en contacto con un terapeuta sería de gran ayuda. Busca asesoramiento para tratar cualquier problema que pueda estar afectándote.
Pero el principal consejo que puedes tomar es conectarte con tu sexualidad. Ya sea sola o en pareja, tu cuerpo merece ser explorado. Si eres presa de una relación ya monótona trata de sortear la rutina y anímate a intentar cosas distintas: juego de roles, hablar "sucio", usar ropa sexy… Y recuerda, está comprobado que el cuerpo mientras más sexo tiene, ¡más quiere!
No te des por vencida, disfruta de la vida y el sexo. Si necesitas una ayudita, lee sobre las bebidas afrodisíacas para una noche apasionada y cómo tener más placer durante el sexo.
