Jacky y Martín abren su corazón tras la pérdida de su bebé

 Por Miriam Garcia

Jacqueline Bracamontes y su esposo Martín Fuentes vivieron un momento difícil hace exactamente un mes, cuandose enteraron de que uno de los gemelos que esperaban, el varón, falleció por complicaciones respiratorias.

Aunque la pareja está feliz por tener a su lado a "Mini Jacky", como han llamado cariñosamente a su bebita, ambos reconocieron esta mañana en entrevista para el programa matutino "Hoy" que aún no superan la pérdida de "Martincito".

"Yo creo que con el tiempo se logra superar; hoy por hoy yo no lo he superado todavía, pero lo voy a lograr superar con el amor de mi esposo y de ver a mi nena; es el mayor apoyo de los dos", expresó la actriz y conductora.

Por su parte, Martín Fuentes habló del doloroso proceso de resignación:  "Dios hace las cosas por algo. No es algo que me guste platicar; es algo que ya le dimos vuelta a la hoja. Dios nos mandó una hermosa niña; soy feliz y cuando él quiera me va a mandar a mi niño". 

Martín y Jacky han enfrentado la situación con el apoyo que se brindan el uno al otro y no ha sido necesario que recurran a ayuda profesional: "Yo a ella y ella a mí, esa es nuestra terapia, unidos a Dios cada vez más y nada más. Es lo único que tenemos que hacer. Si algo nos duele, hablarlo. Y cuando uno tiene ganas de llorar, que llore".

Al respecto del estado de salud de su nena, los esposos explicaron que aunque fue prematura afortunadamente ha ganado peso:  "Estuvo en terapia porque es prematura y checan que todo vaya creciendo bien: el cerebro, los pulmones, el corazón y todo muy bien. La bebé está creciendo;  ya dejó los mamelucos. Estamos contentos porque el doctor nos dio las mejores noticias, que ya estamos dentro de gráficas de un bebé normal".

¿Qué es lo que más han disfrutado de esta nueva etapa como papás?, Jacky narró: "Nuestro momento favorito es bañarla, de verdad es increíble. Darle de comer, ahorita no le he podido dar pecho directamente porque queremos que aumente de peso, estamos con mamila, pero verla dormir, admirarla cada vez más y a Martín como papá, porque no creas que yo la baño, es el papá que la baña. Él se levanta todas las noches a checar como está, dijo que no iba a cambiar el pañal, y ya cambia el pañal".

Pese a este trago amargo, la pareja no pierde la ilusión de tener más hijos: "Si Dios quiere, [que sea niño o niña] lo que sea, pero sí vamos a querer más hijos", expresó el corredor de autos.