Suárez se disculpa y dice que no volverá a morder a un jugador
Luis Suárez pidió perdón al futbolista italiano Giorgio Chiellini por la mordida que le propinó durante el juego entre Italia y Uruguay y que costó la dura suspensión para el jugador charrúa en el Mundial.
"Con independencia de las polémicas y de las declaraciones contradictorias que se ha producido en estos días (…) lo cierto es que mi compañero de profesión Giorgio Chiellini sufrió en el lance que tuvo conmigo los efectos físicos de un mordisco", indicó Suárez en un comunicado.
El uruguayo dijo arrepentirse "profundamente" por el hecho y se comprometió públicamente que "nunca volverá a ocurrir un incidente como este con mi intervención".
La disculpa pública de Suárez fue publicada en su cuenta personal de Twitter.
La FIFA determinó sancionar a Luis Suárez con nueve partidos oficiales con la selección celeste —lo que implicó su adiós al Mundial de Brasil 2014— y una suspensión de cuatro meses en cualquier actividad relacionada con el futbol.
El mismo Chiellini consideró excesiva el castigo contra Suárez y deseó que al menos lo dejaran estar cerca de sus compañeros porque tal sanción "es realmente alienante para un jugador".
Suárez ya había sido acreedor de este tipo de suspensiones por morder a futbolistas en la cancha. Cuando era jugador del Ajax, el uruguayo fue castigado siete partidos por agredir con los dientes al volante holandés Otman Bakkal en un duelo contra el PSV Eindhoven en 2010.
En 2013, el delantero del Liverpool quedó fuera por diez encuentros por morder al jugador del Chelsea, Branislav Ivanovic.
El incidente en Brasil 2014 ha derivado en la pérdida de patrocinadores para Suárez, como la empresa 888poker que señaló que no toleraría ninguna "conducta antideportiva", mientras Adidas suspendió la campaña publicitaria que tenía con el jugador para el presente Mundial.
